El Real Decreto Ley 13/2022 crea, a partir del 1 de enero de 2023, un nuevo sistema de cotización para los trabajadores autónomos.

Esta norma da respuesta a las recomendaciones 4 y 5 del Pacto de Toledo que instan al Gobierno a que, en el marco del diálogo social, acuerde para los autónomos un sistema de cotización basado en ingresos reales avanzando hacia la convergencia de regímenes, igualando el nivel de protección y contribuciones de todos los trabajadores.

Esta medida de integración y convergencia de regímenes se refuerza al incluirse como hito en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, en su línea de acción “30 Sostenibilidad del sistema público de pensiones en el marco del Pacto de Toledo”.

El nuevo modelo de cotización, que se implantará de manera gradual en los próximos 9 años, se basa en la cotización por los rendimientos netos reales obtenidos por el autónomo.

El trabajador autónomo, en función de su previsión de rendimientos, debe seleccionar, de entre 15 tramos, la base de cotización provisional sobre la que se calcularán las cuotas a ingresar mes a mes. La existencia de diferentes tramos permitirá al autónomo adaptar su cotización provisional a la evolución de los rendimientos obtenidos por sus actividades.

Posteriormente, la Tesorería General de la Seguridad Social regularizará anualmente la cotización previa información por parte de la Administración Tributaria de los rendimientos netos computables.